martes, 1 de diciembre de 2009
domingo, 11 de octubre de 2009
lunes, 5 de octubre de 2009
FÁBULAS CÁBULAS
¡Cómo sufren! Pobres canes,
verdadera pesadilla:
los preside una gavilla
de los perros más patanes.
El Jelipe y sus truhanes
muy perversa es la jauría…
La perrada en agonía
lamentando este destino
que por culpa de un cretino
pasan hambre noche y día.
Ese perrito funesto
siempre ha sido un hocicón,
se engrandece el bravucón
allá arriba de un gran puesto.
Un impuesto él ha propuesto
porque, dice, son sus planes
a los pobres darles panes…
En el cielo, como un santo,
y en la tierra mientras tanto
¡Cómo sufren! Pobres canes
¡Cómo sufren! Pobres canes
no tienen para el sustento
ni tampoco alojamiento,
porque son de bajos clanes.
Ya lo dicen los refranes
que la cosa no es sencilla,
al que no es de camarilla
ni del club de chupicuates,
resistiendo cual orates:
verdadera pesadilla.
Verdadera pesadilla
para el perro de la calle
el que no es de mucho talle,
pero en cambio esa perrilla
a quien dicen La Gordilla,
bien pagada la ladilla
encabeza una planilla
de los perritos maestros
como si fueran secuestros,
los preside una gavilla
Los preside una gavilla
de lebreles muy ojetes,
siempre andan tras los billetes
siguiendo a ese cabecilla
con cara de rabadilla;
el perro gordo Castranes,
ayudando en sus desmanes
asistiendo al Falderón
que le juega al vil ladrón
de los perros más patanes.
De los perros más patanes
un tal chavo Chávez Chávez
será quien quite las trabes
para que otros barbajanes,
bien transas los muy rufianes,
ya perpetren sus afanes:
“mejor yo, que tú me ganes
pa´ mí no hay ningún problema”
pareciera ser su lema
el Jelipe y sus truhanes.
El Jelipe y sus truhanes,
y también el perro Diego,
lanudo, de enorme ego,
de grotescos ademanes.
Es patrón de unos chalanes
que puso en secretaría
a cobrar su canonjía,
y aunque ya no es un sabueso
él sigue royendo un hueso.
¡Muy perversa es la jauría!
Muy perversa es la jauría
con qué manera burlesca
protege a los Bribonesca,
perruchos de mala cría,
dueños de oceanografía
ven en PEMEX su alcancía
y hacen una ratería.
¡Cuánto seguirán saqueando!
Mientras unos van ganando
la perrada en agonía
La perrada en agonía
y entre tanto asesinato
se preocupan del no nato
en la procuraduría.
¡Es por pura hipocresía,
la vida vale un pepino!
El que no es fino canino
que se muera como un perro,
ni una flor en el entierro
lamentando este destino.
Lamentando este destino:
mal habida la fortuna
que el cachorro garcialuna,
millonario repentino,
por negocio clandestino
más que perro es un porcino.
Eso que hoy el muy ladino
comparece ya molesto
y pretextos él ha puesto:
¡Que por culpa de un cretino!
Que por culpa de un cretino,
decadente presidente,
carente de coeficiente,
un mezquino y anodino,
resulta ser el padrino
de la perra oligarquía;
por eso, gran mayoría
de perritos inocentes
a merced de delincuentes
pasan hambre noche y día.
jueves, 10 de septiembre de 2009
martes, 25 de agosto de 2009
ARTE RUPESTRE
A mediados del periodo estultioceno, en un inútil esfuerzo por conservar su progenie, el Homo Oligofrénicus extinguió su propio linaje cuando impuso a un simio menor, el Cesarnavándertal, como macho alfa de la mandada. Esta clase de excrementÍvoros eran territorialistas acumuladores de riquezas ajenas.
lunes, 10 de agosto de 2009
NARQUEOLOGÍA MEXICANA
jueves, 30 de julio de 2009
martes, 14 de julio de 2009
sábado, 4 de julio de 2009
lunes, 1 de junio de 2009
lunes, 20 de abril de 2009
TEATRO DE MARIONETITAS
martes, 7 de abril de 2009
EL CIRQUE DU CULEIL
miércoles, 25 de marzo de 2009
NARQUEOLOGÍA MEXICANA
El Periodo Reteclásico es la decadencia del esplendor de la cultura Hummerozteca. Se caracterizó por la impune opulencia de sus gobernantes, como la cacique restirada Charrítzin Quepopoca (Expeler Fondillo) quien manipulaba usando conjuros y malas mañas. Era la Reina del PANAL de los zánganos. Ponía y quitaba a los achichinquis ya que tenía mucho más poder que el mismísimo Empeorador Fecaloxtli.
Pieza del Clásico periodo Tardío de la incultura del Tío-Teguacán (así era conocido el Señorito Tolucas por la costumbre que tenía de ordenarle a sus súbditos que usaran el burbujeante refresco de orígen poblano, mezclado con chile, como arma disuasiva y recurso retórico ante la protesta pública) Asombrosamente, este mascarón del Tlatoani fue descubierto con todo y su instalación eléctrica para hacerlo resplandecer en la oscuridad.